domingo, agosto 15, 2010

Los humanos sin civilizar

Los idealistas, los más culturizados, y los religiosos en general, desde tiempo ha, quieren hacernos tragar que hasta que no se piensa (ideas) no se existe. Para ellos el hombre sólo es hombre a partir de ser un idealista, un domesticado, digo yo. Tiene cierta lógica ya que ellos piensan que para que algo exista tiene que estar previamente definido y, por ello mismo, catalogado.
Hay que decir que el hombre al que ellos se refieren es el hombre espiritual, el hombre verdadero, el hombre pensado, el ideal de hombre. Platón definió al hombre como “un bípedo desplumado” y ante el sarcasmo de Diógenes que se presentó en el Ágora con un pollo desplumado diciendo “Éste es el hombre de Platon” añadió “y de uñas planas”. Pero ese hombre era según Platón el hombre sin sustancia, el animal que seríamos sin el componente espiritual.
Pero es claro que yerran de medio a medio. Antes de darle nombre de rosa a una flor, ésta ya era, simplemente no estaba ordenada así, con todo. Los diferentes juegos de sexo entre individuos, sólo existirán para los definidores cuando los cataloguen; heteros, homos, gays, travestidos, lesbos, etc, etc. Pero los juegos ya eran antes de ser ordenados.
Ni qué decir tiene, que yo, el original, soy antes de existir como Pepe o como Juan.
Los platónicos, cristianos e idealistas odian o desprecian la animalidad del hombre real, del original, por ello han ideado al hombre espiritual, el idealista, hecho por Dios a su imagen y semejanza, el hombre artificial, el hombre razonable.
Pero claro, la realidad es muy tozuda por mucho que se la intente desdibujar. Detrás de una cara bonita, del mismo Papa de Roma, de su Cristo, y de todo quisqui, hay un culo que caga, una boca que come y bebe, y una polla (los machos) y una vagina (las hembras) por dónde se orina y con la que se copula. Y lo que es más determinante, si no se come y se bebe, se caga y se orina no se puede tener ideas pues no consigues vivir, igual que si no duermes.
Por este vivir todos los organismos vivos desarrollan estrategias de supervivencia, De ese bicho primigenio hemos evolucionado hasta el bicho actual, otros han evolucionado de forma diferente , ni más ni menos.Y este bicho en su etapa actual, esencialmente sigue queriendo lo mismo de siempre: comer, beber, cagar, mear, dormir y jugar. Divertirse y estar contento o alegre son lo más deseado. Después de milenios de ideas, seguimos siendo bichos cambiantes.
Algunos dirán que hago apología de la animalidad, pero no es eso, simplemente constato lo que soy y lo que veo. Además, como decía alguien: “La más inteligente de las inteligencias es el instinto” y eso forma parte de nuestra animalidad. ¿O acaso somos mejores que el resto de animales? En mi opinión sólo diferentes.
Podéis hablarme de la civilización, y de cómo nos ha cambiado, refinándonos y demás cosas, pero yo no veo el cambio realmente en lo básico. Además la civilización no tiene mucho de lo que presumir. Nos ha culturizado de forma alienante, y ha hecho pecaminoso todo lo básico, haciéndonos ser víctimas de ramalazos esquizofrénicos, entre lo que somos y lo que “deberíamos ser”.
Los no civilizados han sido catalogados de salvajes, dándole un sentido peyorativo a esa definición. Pero jamás un salvaje ha sido tan cruel como un civilizado: te puede matar, pero no martirizar. Las civilizaciones desde su advenimiento han sido como plagas devastadoras , además de verdugas para con el no civilizado.
Los salvajes son los no domesticados, no los que no saben nada, no los pueblos indígenas. Diógenes dice aquello de que “cualquier rústico (no cultivado, no civilizado, no refinado) sabe lo necesario para vivir”, y ésa es la cuestión, que fuera de lo basico sólo hay ejercicios de sustitución, pura fachada artificial.
Así que, come y caga bien, bebe mejor, folla mucho, trabaja poco, duerme lo que necesites, y diviértete de forma gozosa. Si te dicen que vivir es algo más, ríete y mándalos al carajo.

Autor

  Sherlock Holmes

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por su comentario.